Inscritos
lunes, 11 de enero de 2010
Annie no se tenia miedo, lo había buscado por todas partes, pero a ella no le habían puesto el cartel de “NO TOCAR”. Así que lo hacía, se tocaba. Se tocaba por las mañanas, cuando despertaba enredada en las sábanas, después de uno de sus sueños tan reales, se quemaba los dedos con el calor que le salía de entre las piernas, porque la realidad del sueño no había tenido la decencia de dejarla acabar. Se follaba con rabia y desesperación porque solo era un sueño y acabaría despertando, se follaba hasta morder la almohada, con los ojos cerrados para poder alargar el sueño un poco más, hasta que, gritando, se despertara.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Que intenso. Me ha encantado
ResponderEliminarAlaa! :O
ResponderEliminarcuanto fuego sale de esas palabras.. me ha gustaado!
Me ha encantado el texto...
ResponderEliminarSalu2
Que texto tan intenso,
ResponderEliminarme ha gustado :)
¡Un beso!
Espero que ese sueño suyo se haga realidad
ResponderEliminarLa rabia y frustración son las mejores musas.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
maja sois una bomba.
ResponderEliminaraveces prefiero bañarme con agua helada, de esas que queman para sentir que vivo. no solo existo.
el mejor de los saludos.
me has pillado con tu manera de escribir. te sigo.
te invito a mi mundo. me seguis tambien o que?
Estremecedor.
ResponderEliminarBeso :)